“El estructuralismo, llamado también psicología estructural, es una teoría del conocimiento desarrollada en el siglo XX por Wilhelm Maximilian Wundt y Edward Bradford Titchener”. Inicialmente fue Wundt quien empezó su práctica desde su laboratorio en Leipzig, no obstante, fue Titchener quien continuó su legado pero con ciertas reformas.
Fue gracias a Titchener que se expandió el estructuralismo a territorio norteamericano. Fue ahí donde este se organizó con características particulares y se enfocó de manera significativa tanto en lo experimental como en lo atomista.
El término “estructuralismo” sale por primera vez a la luz durante el debate que se llevó a cabo entre Titchener y los funcionalistas en el que se discutía acerca de la manera en que funcionaba la mente. Titchener decide dedicarse por completo en esta doctrina o teoría, ya que se fue por un tiempo del laboratorio de Leipzig (donde trabajada de la mano con su mentor, Wilhelm Wundt) y cuando regresó, se encontró con que la psicología que se estaba practicando en ese entonces en el laboratorio, ya no tenía nada de experimental. Esto causó una gran decepción en su persona, lo que lo impulsó a aceptar el trabajo que le ofrecieron en el Cornell College como encargado de su laboratorio de Psicología, que se había abierto un año antes.
Durante más de 20 años, el estructuralismo fue la psicología oficial en Norteamérica; sin embargo, tras la muerte de Titchener en 1927, este sufrió una fuerte decaída que más adelante terminó en su olvido total, puesto que se dejó de utilizar.
Según lo planteado por Titchener en 1899, los psicólogos experimentales (seguidores de la teoría estructuralista), debían centrarse en hacer un análisis de la estructura de la mente y tratar de comprender los procesos elementales que ocurrían en esta.
Titchener se opuso de manera ferviente a la Psicología de la Gestalt, pues afirmaba que en esta no se hacía psicología, sino “fenomenología experimental”; también, se opuso al Psicoloanálisis, manifestando que el inconsciente era un “invento”. Sin embargo, Titchener se mostró interesado en el método de introspecciónexperimenta o autoobservaciónl, el cual era confiable porque los observadores/pacientes eran entrenados de manera rigurosa para describir los elementos de su estado consciente [1) sensaciones, 2) imágenes y 3) estados afectivos] y no reportar lo que observaban a partir de los estímulos experimentales; además, según Titchener, era “el único método adecuado” para la investigación psicológica.
Una crítica al estructuralismo sería que este no avanzaba, no había progreso y esto se debía a la forma de ser de Titchener, pues no permitía que se hicieran cambios e iba contra la corriente… por más que hubiese oportunidad de hacer algún progreso en su teoría, si veía otras personas seguían esa idea, la dejaba de lado. También se cree que el estructuralismo siguió vigente durante tanto tiempo debido a que la gente respetaba a Titchener por ser quien era y como no querían, de una u otra forma, importunarlo, permitieron la vigencia de este se mantuviera por más tiempo del necesario.